Entender nuestras emociones y cómo gestionarlas
Inteligencia emocional: cuidar el bienestar emocional
Las emociones son una parte esencial de nuestra experiencia humana, ya que influyen en nuestros pensamientos, acciones y relaciones, por lo que es fundamental entender nuestras emociones. Sin embargo, es habitual establecer categorías entre emociones «positivas» y «negativas», una clasificación que a veces puede resultar simplista e incluso totalmente achacable: «Me enfado cuando debería estar feliz» o «Me da envidia, soy horrible».
NO, nuestras emociones son señales que nos ayudan a comprendernos mejor a nosotros mismos. Así pues, ¿cómo puedes hacer para gestionar mejor tus emociones?
Comprender mejor tus emociones
Comprender la naturaleza de nuestras emociones y cómo gestionarlas es determinante para alcanzar un bienestar emocional equilibrado.
Aceptamos los días lluviosos, igual que los soleados, porque aportan sus beneficios a la naturaleza. Con las emociones ocurre lo mismo, su objetivo es ayudarnos a comprendernos mejor para que podamos actuar en respuesta y recobrar un equilibrio interno.
¿Cómo gestionar las emociones?
La clave para alcanzar un bienestar emocional equilibrado reside en manejar mejor las emociones, sean cuales sean. Te presentamos aquí algunos consejos prácticos:
1- Reconocimiento y aceptación:
Siéntate y siente tu cuerpo en contacto con la superficie sobre la que te encuentras.
Respira conscientemente y cierra los ojos.
Toma conciencia de tus emociones, incluso de las más molestas, y observa las sensaciones corporales.
Continúa respirando tranquila y profundamente.
2- Expresión creativa:
Encuentra una manera de expresar tus emociones de forma constructiva, ya sea a través de la escritura, el arte o la música… No olvides que la creación artística, a lo largo de los siglos, siempre ha sido un medio de contar una historia, de expresarse de forma más o menos pictórica o simbólica. No se trata de hacer algo bello, sino de liberar emociones a través de las formas, los colores y la dinámica del trazo de una pincelada, …
Personalmente, me encanta escribir y liberar mi carga emocional sobre el papel. Sin pensarlo demasiado, el objetivo no es escribir el próximo bestseller, sino expresarse. Es suficiente con intentarlo.
3- Ser amable con uno mismo:
Trátate a ti misma con dulzura y compasión, especialmente cuando atravieses periodos difíciles de angustia emocional.
Ponte un límite de tiempo de 15 minutos y permítete explorar intensamente tus emociones.
Llora, grita, maldice … En definitiva, déjate llevar y en cuanto suene el cronómetro, no olvides agradecer por este momento en el que has vivido plenamente tus emociones.
Estos ejemplos no son concluyentes, pero constituyen un buen punto de partida.
Si hay una cosa (o dos) que siempre debes recordar es que nuestras emociones son siempre correctas y legítimas.
En lugar de juzgarlas como positivas o negativas, es necesario reconocer su importancia y aprender a gestionarlas de forma sana y constructiva para fomentar tu bienestar emocional y tu realización personal.
Inteligencia emocional: la clave para una mejor gestión de las emociones
Por ir más lejos, diría que aprender a reconocer, aceptar y gestionar estas emociones se denomina inteligencia emocional.
Es una gran ventaja ser consciente de esta capacidad, porque contribuye en gran medida a nuestra vida cotidiana si sabemos aprovecharla:
– Confianza en sí mismo: Es la capacidad de reconocer y comprender las propias emociones, incluidas sus causas y efectos en el comportamiento. «Me conozco bien, así que confío en mí mismo.»
– Control de sí mismo: Significa ser capaz de regular las emociones, motivarse y perseverar ante los obstáculos.
«Sé que este contexto no es seguro para mí, así que me protejo»
– Empatía: Ser capaz de comprender y sentir las emociones de los demás y actuar en consonancia.
«Escucho sus dificultades y adapto mi comportamiento»
– Habilidades sociales: Esto incluye la capacidad de comunicarse adecuadamente, resolver conflictos, cooperar con los demás y establecer relaciones sanas.
«Escucho los puntos de vista de todos»
Por tanto, en muchos sentidos comprendes lo importante que es analizar nuestras emociones, tanto a nivel personal como social. Cuanto más sepamos descodificar nuestras emociones, podremos convivir de manera más tranquila.
Después de ver cómo entender nuestras emociones y el concepto de inteligencia emocional, te proponemos que veas el siguiente artículo: Autohipnosis: ¡vive con confianza hablando con tu yo superior!
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